Diez minutos de gimnasia facial al día para reafirmar el rostro

Uno de los propósitos más comunes al comenzar un nuevo año es el de hacer más deporte. Ya sea al aire libre o en un centro, la idea de que moverse y activar nuestros músculos corporales tiene beneficios para la salud parece bastante obvia, pero ¿qué pasa con el rostro, te has planteado hacer más gimnasia facial?

 

De la misma manera en que fortalecemos nuestros brazos, piernas o abdomen para que se mantengan jóvenes y tonificados, el rostro requiere de una rutina de ejercicios que pongan nuestros músculos a trabajar. Con solo diez minutos al día, los beneficios son importantes. Desde combatir la flacidez a activar la microcirculación, si consigues convertirlo en un hábito verás que tu rostro muestra mejor tono y los rasgos se ven más reafirmados. Además, aquí no necesitarás chándal ni equipamiento, solo un espejo donde controlar los ejercicios faciales recomendados y algunos productos de belleza, ¡vamos allá!

 

Tabla de ejercicios faciales reafirmantes

 

Siempre de la mano de una serie de cuidados antiedad, seguir una serie de movimientos con un ritmo y cadencia determinados puede potenciar los efectos de cremas y sérums haciendo en conjunto que la piel se muestre más suave, tersa y luminosa. Además, poner en forma la cara puede prevenir y tener un efecto positivo sobre la apariencia de líneas de expresión y arrugas alrededor de los ojos y boca. Previa aplicación de tu cosmético hidratante favorito, comenzaremos esta rutina de gimnasia facial por la frente, donde puedes hacer estos gestos:

 
     
  1. Fija suavemente con tus dedos los párpados superiores y a continuación eleva las cejas diez veces. Cuando estés acostumbrada puedes intentarlo sin necesidad de sujetarlos.
  2. Mira de frente al espejo y alza las cejas al máximo. Aguanta diez segundos y repite varias veces.
  3. Una vez domines el anterior puedes hacerlo más complicado intentando subir individualmente una ceja primero y después la otra, mientras mantienes la posición de sorpresa con las cejas alzadas. Si puedes, repite diez veces cada lado.
  4.  
 

Para los pómulos, sonríe todo lo ampliamente que puedas y con tus dedos sobre las mejillas intenta llevarlas hacia abajo todo lo posible mientras mantienes esa pose. Después, adopta una media sonrisa en cada lado de tu rostro y con el dedo intenta llevar el músculo lo más arriba que puedas y sostenlo diez segundos.

 

En la mandíbula, intenta dibujar diez veces una sonrisa sin utilizar los pómulos.  Difícil, ¿verdad? Si lo logras, estirarás los músculos de esta zona y tensarás la piel. También puedes probarlo de manera localizada, primero una mitad del rostro y luego la otra.

 

Podemos rejuvenecer la mirada haciendo un guiño parcial, sin llegar a cerrar completamente el párpado, alternando cada ojo. Debes mantener la posición un segundo, asegurándote de que todos los músculos están trabajando, y repetir veinte veces cada uno.

 

Otra opción para los ojos es hacer la “V”. Haz el gesto de la victoria y coloca los dedos corazón e índice de cada mano en el inicio y final de cada ceja, respectivamente. Mira al techo y levanta la piel hacia arriba un segundo, después suelta. Repite seis veces y finaliza cerrando los ojos lo más fuerte que puedas durante diez segundos. 

 

Por último, las arrugas de alrededor de la boca mejorarán si te diriges a los músculos de la zona de los labios. Para ello, pronuncia de manera exagerada las vocales “O” y E” sin mostrar los dientes. Altérnalas quince veces en tres rondas consecutivas.

 

Con un poco de práctica verás que estos ejercicios faciales te salen automáticamente, pudiéndolos hacer mientras tomas un café en la oficina o viendo tu serie favorita. ¡Es cuestión de práctica!

 

Cosmética adecuada para gimnasia facial

 

Lo más importante es partir de unas manos limpias y un rostro igualmente impecable. Te recomendamos el Agua Micelar Anti-edad , con extracto de hojas de olivo BIO, rico en polifenoles. Elimina las impurezas y restos de maquillaje, mientras hidrata, tersa y refresca en una pasada.

 

Después, puedes aplica la Crema Anti-edad de Noche o el Aceite Sérum Anti-edad de Noche para trabajar el rostro. El primero es un tratamiento nocturno regenerador y reafirmante con aceite de oliva rico en polifenoles. Mientras duermes actúa sobre arrugas y líneas de expresión, pero además en el caso de la gimnasia facial nos encanta por su textura bálsamo y su aroma floral, perfectos para masajear y ejercitar los músculos. El segundo es un concentrado antiedad con aceite de oliva Bio, aceite de argán BIO, aceite de jojoba y aceite de camelina. Ideal para aportar elasticidad y luminosidad a la piel, difuminando los signos de fatiga en combinación con el gestual reafirmante que acabamos de desvelarte.

 

Sea como sea, una vez pruebes la gimnasia facial verás como se convierte en un paso imprescindible de tu cuidado nocturno, ya que tus rasgos lo agradecerán y la tensión acumulada desaparecerá. Si quieres algún consejo más para tener buena cara los 365 días del año, no olvides consultar este tema Aquí.